miércoles, 8 de abril de 2009

Gobierno avalará salvataje de la pequeña agricultura con US$ 70 millones


“El Gobierno otorgará un aval de US$ 70 millones para rescatar a los pequeños agricultores de una eventual quiebra. Este monto, otorgado por COFIDE, serviría de garantía para que la banca privada otorgue un crédito para que permita a los pequeños agricultores seguir adquiriendo insumos para la producción de alimentos. Así lo informó el ministro del Ambiente, Antonio Brack, quien además indicó que en garantía los pequeños agricultores pondrían su propia producción.

Brack, quien dio esta información al programa televisivo ‘Portal financiero’, de Canal N, informó que en todo el proceso del rescate se están tomando en cuentas los aspectos social, económico y ambiental.”

Todo lector medianamente enterado de la política del gobierno de Alan García levantará la ceja expresando algo de incredulidad ante esta noticia. No es algo que calce con lo que este gobierno suele hacer. Pero, amigo lector, tranquilícese. Recupere usted su confianza en la consistencia de este gobierno con sus orientaciones estratégicas, y lea a continuación el texto de la noticia real, publicado en El Comercio el 1 de abril en la página B1:

“El Gobierno otorgará un aval de US$ 70 millones para rescatar a Doe Run Perú (DRP) de un eventual cierre de sus operaciones en La Oroya. Este monto, otorgado por COFIDE, serviría de garantía para que la banca privada otorgue un crédito que permita a la minera seguir adquiriendo concentrados. Así lo informó el ministro del Ambiente, Antonio Brack, quien además indicó que en garantía DRP pondría sus acciones a disposición de COFIDE.

Brack, quien dio esta información al programa televisivo ‘Portal financiero’, de Canal N, informó que en todo el proceso del rescate se están tomando en cuentas los aspectos social, económico y ambiental.”

Como se sabe, los peruanos dependemos mucho de los pequeños agricultores porque son los principales productores de alimentos para el país. Son centenares de miles. Bien merecerían un apoyo.

Como se sabe, también, Doe Run es una empresa que mantiene una refinería en La Oroya, que da trabajo a 3500 personas, que asegura que dicha ciudad continúe siendo una de las diez más contaminadas del mundo -con miles de niños con exceso de plomo en la sangre- y que incumple sistemáticamente sus compromisos de reducir los niveles de contaminación. Que, además –nos informa El Comercio- tiene un solo propietario, un estadounidense con una fortuna de 4 mil millones de dólares, que tiene un avión privado de 40 millones de dólares (un poco más de la mitad del monto que el gobierno está comprometiendo del dinero público en apoyo a la empresa) y que tiene acumuladas multas por 900 millones de dólares en Estados Unidos por ‘incumplimientos ambientales’.

¿No les parece que todo esto es un escándalo? ¿Uno más?